Todo por la patria. Frase que ayer con motivo de la fiesta nacional, paso por la mente de los muchos españoles que acudieron y participaron en el desfile de las fuerzas armadas que tuvo lugar en Madrid. Con lo que voy a decir no quiero ofender a nadie y si lo hago de antemano pido perdón, pero es que vivimos en un país de pandereta. No concibo de ninguna forma que un país que presume de ser moderno cómo el nuestro, tenga un desfile militar cómo modo de celebrar su fiesta nacional.
Es cierto que tenemos que alabar la labor que están haciendo en muchas partes del mundo el ejercito español, pero una demostración de fuerza no creo que represente a las más de cuarenta millones de personas que vivimos, quizás unos actos lúdico festivo no militaristas y que no solo representen a una facción de otra época hubieran sido mas representativos. Actos que nos recuerden porque tenemos que dar las gracias por ser españoles, y no demostraciones de fuerza cara el mundo que no sirven sino para dejar aún más en evidencia a un país que le cuesta salir de el malogrado término de la España Cañí. Y es que si algún personaje de otra época ayer hubiera levantado la cabeza, Diós no lo quiera que está muy bien donde está, hubiera estado contento porque la España que el dejo sigue viva, por lo menos un día al año. Hay cosas que nunca cambiarán.
Por cierto soy de la misma opinión que Mariano Rajoy, el desfile será muy bonito para los que participen y para sus familias, pero es un coñazo de principio a fin. Si lo analizamos superficialmente consiste en que un grupo de personas vestidas con algo que ellos llaman trajes de gala, desfilan delante de altos cargos de estado, los cuales después presumen de lo bien que a estado verlos pasar durante más de dos horas. Señores no mientan, el muy discutido líder del PP por una vez, y sin que sirva de precedente dice la verdad, es un coñazo, si quieren que haya un desfile militar, que ese es otro tema, que vallan uno o dos de cada tropa y así en cinco minutos todos a comer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario