Pequeña Miss Sunshine

Como ya sabéis este blog no pretende convertirse en un espacio de critica cinematográfica. Pero acabo de ver una película que de manera inesperada me acaba de hacer sonreír de nuevo. Esta no es otra que "Pequeña Miss Sunshine". Tal vez sea por el momento de euforia en el que estoy ahora sumergido, pero me voy a permitir la licencia de clasificarla como la mejor road movie de la historia del cine.

En sus primeros momentos el drama es el que se apodera de toda la acción, eso si con unos ácidos toques de humor que despiertan al espectador. Según pasa la película y van evolucionando los personajes te das cuenta que hay una fuerza grabitaroria que te hace quedarte pegado a la silla, aunque las cosas que estén pasando sean negativas.

Pero sin duda la mejor parte de la película es ese final apoteósico en el concurso de belleza. La familia se encuentra rodeada de la gente mas estereotipada que se pueda imaginar, critica a la sociedad costumbrista y clasista americana. Todas las participantes del concurso hacen el típico número de "Talento", hasta que sube nuestra protagonista y entonces es cuando te das cuenta que ese rato que has estado viendo la película no ha estado en balde.

En esta escena se nos demuestra que la recoinciliación de una familia rota no depende de grandes psicólogos, sino de la admiración y el amor propio por un miembro de la familia, a el cual hay que defender en un momento difícil. (La querían expulsar del concurso por un baile un poco picante, aunque mas bien es porque la niña era fea).

Así que si leéis esto por favor no lo dudéis, VER ESTA PELÍCULA, y si por un momento os reís y enternecéis la mitad que yo, estas palabras habrán valido la pena.